A ti

A ti que calmas con tus manos
Ese frío intenso que siento con tu ausencia
En esos días que mi bosque se vuelve más denso
Y la noche no termina

A ti que con tu mirada en mis ojos
Rechazas por completo mi soledad
Y me impregnas en mi pelaje el aroma de tu piel
Dejándome un recuerdo tangible que puedo conservar por más tiempo

A ti que al verte llegar
Devuelves mi cuerpo a mi alma
Y puedo sentir mis manos otra vez
Renuevas mis fuerzas en medio de un llanto amargo
Y endulzas mi oído con el sonido de tu voz

A ti que te habías ido
A ti que has vuelto a mi lado
A ti que vienes y vas a conveniencia
A ti que juegas con mi paciencia

A ti que obsesionas mi mente
Me sigo preguntando si amarte o matarte
Si esperarte o marcharme
A ti, perdida y desprotegida,
Flor prohibida

A ti te doy la dicha de verme hombre

y lobo al mismo tiempo
De merecer mi infierno y mi cielo
A ti y nadie más
Aunque hoy ya no estás...