Te doy mi corazón

Te doy mis ojos
Para que contemples la belleza de tu rostro
Te doy mis oídos
Para que te deleites con el sonido de tu voz al decirme que me amas
Te doy mis manos
Para que hagas vibrar mi cuerpo al rozar tu piel

Te doy mis labios
Para que sientas cómo se derriten por los tuyos
Te doy mi más grande miedo
Para que entiendas porqué me preocupo tanto por ti
Te doy mi mayor alegría
Para que mires tu reflejo en ella

Te doy mis días y mis noches
Para que seas siempre lo primero y lo último
Te doy mis silencios
Para que escuches a tu corazón latiendo en mí
Te doy mis deseos
Escritos en un papel
Para que leas tu nombre una y otra vez

Te doy mi infierno y mi tristeza
Serán cielo y felicidad con tu presencia
Te doy mi vida
Pero no mi corazón...
Ese te lo di desde el principio...
Mucho tiempo antes de este título.

Canto de sirenas

Conoció su ira y su encanto
Su vida y su muerte
Se enamoró del velo negro que cubría su rostro
Sentía una atracción absurda por su cuerpo
Y moría en deseos por hacerla suya
Tan suya como su lascivia le permitiera.

Fue testigo de la injusticia que dominaba su destino
Y de la inmundicia de sus pensamientos se fue llenando poco a poco
Sin darse cuenta

Quizás antes habría puesto freno a esta locura
A tiempo para no caer en un abismo de tentación
Pero ya no fue posible

Sus labios oscuros eran un llamado que no podía desatender
Y el aroma que emanaba de su piel
Era como el canto de una sirena.
Glorioso
Perturbador.

Me pidió que escribiera estas palabras
Antes de perder la razón y no recordar
Cuando fuera preso de esta dulce maldición
El camino de vuelta ya se habría olvidado para entonces.

Ruego al cielo por su alma
Ya son varios días sin saber de él.

La última vez que le vi
Llevaba cadenas en su cuello
Y una pistola cargada en su mano derecha.
Se alejaba con cadencia lenta y constante
Hasta que le vi desaparecer
En las sombras de un espejo...

Monstruo

Hincado
Cabizbajo
Reflejo mis penas en el agua
Una dulce melodía recitada por el viento
Y en mis ojos
Lágrimas de excitación y sangre
Derraman copiosamente mi lamento
La oscuridad recorre mis entrañas
La luz que una vez fue amor
Se me escurre entre los dedos

Abatido
Sólo puedo esperar el final
De un camino dominado por el musgo
De una vida entorpecida por un vicio
Droga maldita!
Ahí te van mis penas

Llora este odio y esta angustia!
Pues los he puesto como ofrenda
Y mi cabeza
Perdida en un banal deseo de venganza
Niega por siempre esta insolencia
Niega por siempre esta insolencia
Y me convierte en el monstruo
Que ahora soy...

Lleno de amor

Lleno de amor
Ese amor incontrolable
Ese amor que no me cabe en el pecho
Que se desborda de mi cuerpo en un grito
Ese amor humano
Sensible
Sencillo
Potente
Capaz de luchar por la felicidad de alguien
Por morir dedicado a tu bienestar
A tu felicidad.

Inalcanzable es este amor
Inevitable
No refleja tu devoción
Ni espera tu cariño
Sólo ama sin reparos
Viviendo de la gratitud de tu sonrisa
Alimentado con tu presencia
Extasiado con tu perfume.

Este amor es grande
Más grande que el mismo amor
Qué haría para contenerlo en mi alma?
Qué apacigua mi sed de amarte?

Este amor es fuerte
Pero me hace débil a tu lado
Me ha hecho cometer errores
Y perder el rumbo que llevaba
Este amor me aleja de la realidad
Viviendo en mundos surrealistas
Despertando deseos absurdos
Burlando a mi imaginación
Y jugando con mis sentimientos.

Lleno de amor
Vivo en mi vida un sueño
Lleno de amor sufro por este amor
Pero lleno de amor
Todo vale la pena.

Como el viento perenne que acaricia tu piel 

mientras cierras los ojos y tus brazos 

extendidos dan un humilde recibimiento.

Como ese río que miras fluir fresco 

radiante 

cristalino 

que no sabes donde empieza 

ni mucho menos donde termina

y en el cual recoges el reflejo de tu dulce rostro.

Como ese pensamiento que se lleva 

en lo más profundo del alma

y siempre está presente

es un recuerdo

es una memoria 

y quizás un hermoso sentimiento 

de seguridad que te conforta.

Así es la amistad. 

Un tesoro invaluable que no muere con el tiempo

ni se deja seducir por los ratos en que no pueda verte.

El no tenerte cerca no implica el olvido

porque la más pequeña de tus ausencias 

me provoca extrañarte

y nace en mi pecho un nuevo anhelo 

que cuentes conmigo siempre 

y sepas que este detalle es tan sólo una compensación

Para agradecer el regalo tan maravilloso 

que recibí de ti el mismo día que te conocí:

TU AMISTAD.